
Se llama Juanma y es noble, inocente, natural,, bondadoso, creyente, un poco niño, alegre, es sacerdote y payaso de profesión.
Está lleno de ternura, de calor en el corazón, de emoción desbordante, de pasión y piedad, pero me da la impresión y confieso que no sé por qué, tiene lágrimas acumuladas en el alma y que las derrama ante el Sagrario.
Estoy muy feliz de haber disfrutado de su compañía durante estos dos meses de ensayo, y soy consciente de que es un cura con muy "buena onda" y con una sensibilidad muy limpia.
Me hizo el honor de aceptar un papel en la "obra de teatro " es "Manolo, el marido de la Petra".,y mucho más importante para mí, su compromiso con las familias afectadas por la crisis., su compromiso con los demás "actores", y su compromiso consigo mismo.
Hemos compartido momentos,que no se me van a borrar nunca del corazón ni de mis recuerdos más especiales.
Todo esto que hemos vivido, no sólo edifica nuestra vida sino que nos dá mucha esperanza., y en estos tiempos que corren, donde le van mal las cosas a la glesia, cn acusaciones serias probadas y demostradas... yo digo que "NO TODOS SON, NI SOMOS IGUALES", lo que pasa es que alcanzan más notoriedad.
Me quedo con los curas como Juanma, por su labor callada, por hacer reir a los niños enfermos y sanos, por entregarse a los demás , por ser "PAYASO"... por ayudar a quien lo necesite, por hacer todos los poblemas suyos... pero claro, todos los que son sencillos como él , no salen en los telediarios.
Es una persona que convence a cualquiera de que ser cristiano vale la pena con sólo mirar sus ojos , su sonrisa, y su buen hacer.
Es un honor para mí, ser su amiga.
Me gusta la imagen de Cristo que nos ha proyectado este cura/payaso .